2401 El séptimo
mandamiento prohíbe tomar o retener el bien del prójimo injustamente y hacer
daño al prójimo en sus bienes de cualquier manera. Prescribe la justicia y la
caridad en la gestión de los bienes terrenos y los frutos del trabajo de los
hombres. Con miras al bien común exige el respeto del destino universal de los bienes
y del derecho de propiedad privada. La vida cristiana se esfuerza por ordenar a
Dios y a la caridad fraterna los bienes de este mundo.